El Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, el Instituto de Estadísticas y la Oficina de la Procuradora de las Mujeres (OPM) respaldaron este miércoles en vista pública el Proyecto del Senado 223, que propone implementar un comité para cuantificar el trabajo no remunerado en Puerto Rico.
El proyecto 223, de la autoría de la senadora independentista María de Lourdes Santiago Negrón, tiene el propósito de cuantificar la magnitud del trabajo no remunerado y analizar la disparidad entre géneros sobre la participación y distribución de tareas domésticas.
“Esta medida es parte de un conjunto de iniciativas que presentamos en el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, porque a pesar de que las mujeres hemos logrado unos avances jurídicos importantísimos, hay espacios en los que no se puede legislar la equidad y usualmente eso ocurre en los entornos domésticos”, reconoció Santiago Negrón desde la vista pública en el Capitolio.
Asimismo, el proyecto pretende identificar variables sociodemográficas que inciden en la desigualdad de la distribución de cuidado en el hogar entre hombres y mujeres, y cuantificar el valor del trabajo no remunerado en Puerto Rico.
Según define la medida, el trabajo no remunerado es “trabajo de subsistencia, doméstico, el cuido de familiares y el voluntario o al servicio de la comunidad”.
El proyecto también cuenta con la coautoría de los senadores del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), Ana Irma Rivera Lassén y Rafael Bernabe Riefkohl, y se encuentra en la Comisión de Derechos Humanos y Asuntos Laborales.
“No solo que se reconozca, sino que es darle equidad a todas las personas”, sostuvo Rivera Lassén, presidenta de la comisión.
El proyecto 223 propone como herramienta para recopilar la información una Encuesta de Uso de Tiempo (EUT) a partir de las guías establecidas por la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
“Estas (encuestas) proporcionan información sobre cómo la población distribuye su tiempo, según variables tales como sexo, edad, raza, nivel socioeconómico y tipo de hogar”, manifestó en su ponencia el secretario del Trabajo, Carlos Rivera Santiago, representado por la licenciada Naihomy Álamo Rivera.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el 70% de las personas que viven en pobreza son mujeres. Santiago Negrón detalla, en el proyecto, algunas razones que vulnerabilizan a las mujeres como el discrimen, la brecha salarial, la violación a los derechos reproductivos, la carga del trabajo doméstico y el trabajo de cuidado, los estereotipos sexuales en la educación, entre otras.
Otro estudio reciente efectuado por ONU Mujeres y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), titulado From Insights to Action: Gender Equality in the Wake of COVID-19, reveló que para el 2021, por cada 100 hombres, de 25 a 34 años, que vivan en pobreza extrema, habrá 118 mujeres. Esto podría incrementar a 121 mujeres por cada 100 varones para el año 2030.
Ana Jara Castro, gerente de proyectos del Instituto de Estadística, presentó la ponencia del director de la agencia, quien recalcó la importancia de tener por primera vez una medida para cuantificar el trabajo no remunerado en Puerto Rico que permita calcular la carga de trabajo y tiempo asignado a las mujeres.
“Esto visibilizará la importancia del trabajo no remunerado y brindará herramientas para desarrollar políticas públicas que busquen la igualdad en las labores de cuidado, y trabajo doméstico y mejorar la calidad de vida de las mujeres y sus condiciones socioeconómicas. No obstante, es importante que se asignen los fondos necesarios para implementar esta iniciativa”, leía la ponencia del doctor Orville Disdier Flores.
Jara Castro explicó que para trabajar la Encuesta de Uso del Tiempo se necesitará asignar un gerente de proyectos estadísticos exclusivamente para estos propósitos. Insistió en la situación precaria de la agencia, la cual solo cuenta con dos gerentes al momento.
Por su parte, la OPM estuvo representada por el licenciado Víctor Casiano y avaló el proyecto que identifican como esencial para afrontar las persistentes desigualdades de género y cerrar la brecha social, económica y política entre mujeres y hombres.
“El paso inicial para la formulación de políticas públicas dirigidas a tal objetivo es, sin lugar a duda, conocer la realidad y cómo y en qué proporciones se manifiesta el trabajo no remunerado en nuestro país”, reconoció la procuradora Lersy Boria Vizcarrondo en su ponencia, presentada por Casiano.
Según la publicación de Empleo y Desempleo en Puerto Rico, el estimado de personas fuera de la fuerza trabajadora en el 2020 fue de 1,570,000. La población inactiva se desglosó como: “31.5% en labores domésticas, 26.9% retirado, 16.0% asiste a la escuela, 12.2% informó estar incapacitado; el restante 13.4% correspondió a las personas clasificadas como enfermos, muy joven o viejo(a) para trabajar”.
“Es evidente que en Puerto Rico existe una gran desproporción entre las mujeres y hombres que no se encuentran en fuerza laboral por motivo de tener la responsabilidad de realizar labores domésticas. No obstante, a su vez es importante evidenciar el trabajo de aquellas mujeres que se encuentran dentro de la fuerza laboral y que a la vez son responsables de las diferentes tareas del hogar al salir de su jornada remunerada”, reconoció el secretario del Trabajo en su ponencia.
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