Foto del archivo de Ana María Abruña Reyes
Abogados que representan a ciudadanos estadounidenses transgénero, no binarios e intersexuales solicitaron al Tribunal Supremo de Estados Unidos que rechace la petición de la administración del presidente Donald Trump para suspender un interdicto preliminar que impide aplicar una política que exige que los pasaportes federales solo incluyan la designación de sexo asignada al nacer.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) presentó la solicitud en el caso Orr v. Trump, que impugna la nueva política del Departamento de Estado implementada tras la orden ejecutiva que Trump firmó el primer día de su mandato, en enero de 2025. Esa orden instruyó a las agencias federales a requerir que los documentos oficiales —como pasaportes, visas y tarjetas Global Entry— reflejen el sexo de una persona “en la concepción”.
Según el comunicado de prensa emitido por la ACLU, “los tribunales inferiores han dejado abundantemente claro lo discriminatoria e infundada que es la nueva política del Departamento de Estado y el daño que representa para cientos de miles de personas como nuestros clientes”, sostuvo Li Nowlin-Sohl, abogada del Proyecto LGBTQ y de VIH de la ACLU.
“Las personas en todo el país dependen de documentos de identidad que reflejen con precisión su identidad: quiénes son en sus lugares de trabajo, sus escuelas y sus comunidades. Los intentos de la administración de negar ese derecho a las personas transgénero, no binarias e intersexuales no tienen base legal o política, y continuaremos luchando contra esta política hasta que sea derrotada permanentemente”, añadió la abogada, en el parte de prensa.
En febrero de 2025, la ACLU, la ACLU de Massachusetts y el bufete Covington & Burling LLP presentaron la demanda Orr v. Trump en el Tribunal de Distrito Federal para el Distrito de Massachusetts, en nombre de siete personas afectadas por la nueva política. Luego enmendaron la demanda para incluir cinco demandantes adicionales y solicitar la certificación como una acción de clase que representa a titulares de pasaportes trans, no binarios e intersexuales en todo el país.
En abril, el tribunal concedió un interdicto preliminar que ordenó al Departamento de Estado permitir a seis de los demandantes obtener pasaportes con designaciones de sexo acordes con su identidad de género o con el marcador “X”, mientras el litigio continúa. Posteriormente, el tribunal amplió esa protección a toda la clase de personas afectadas.
Un daño inmediato e irreparable
Después de que el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito ratificó el interdicto, la administración Trump solicitó a la Corte Suprema suspender la orden.
“El intento de la administración Trump de negar pasaportes precisos a cientos de miles de estadounidenses causaría un daño inmediato e irreparable si se permitiera que entrara en vigor”, planteó Jessie Rossman, directora legal de la ACLU de Massachusetts, según el comunicado de prensa.
Rossman añadió que “las personas transgénero, no binarias e intersexuales en Estados Unidos dependen de documentos de identidad precisos para viajar con seguridad, privacidad y dignidad. Estamos pidiendo a la Corte Suprema que rechace esta solicitud de suspensión y que mantenga el interdicto emitido para que nuestros clientes se libren de una profunda interrupción y angustia mientras su caso continúa”.
La ACLU de Puerto Rico expresó que se mantiene atenta al desarrollo del caso y reafirmó su compromiso con la defensa de los derechos humanos y constitucionales de las personas trans, no binarias e intersexuales en el archipiélago.
El interdicto preliminar vigente ordena al Departamento de Estado ofrecer pasaportes estadounidenses con una designación de sexo que corresponda con la identidad de género del solicitante o con la designación “X”, en casos de solicitud de nuevos pasaportes, renovaciones, reemplazos o actualizaciones de nombre o marcador de género.






