Ilustración de Rosa Colón Guerra
El primer implante anticonceptivo fue el Norplant, que fue producto del deseo de crear un método hormonal (como la píldora), pero que fuese de larga duración. El período de pruebas para el implante comenzó en 1975. No fue hasta el año 1984 que la Organización Mundial de la Salud recomendó Norplant como un “método eficaz y reversible a largo plazo para regular la fertilidad”.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó Norplant en 1990, pero este medicamento fue removido del mercado en Estados Unidos 12 años después de su aprobación, debido a que las pacientes reportaron complicaciones anormales.
Luego de que surgieran implantes de diferentes manufacturas en el mundo, en 2010 la compañía Oregon USA introdujo al mercado Nexplanon, la opción que hoy día está disponible en Estados Unidos.
¿En qué consiste?
El implante anticonceptivo consiste en un pequeño tubo plástico que se inserta en la parte superior del brazo y previene el embarazo mediante la liberación de progesterona. Es uno de los métodos anticonceptivos más efectivos en el mercado. El dispositivo tiene un efecto contraceptivo que dura de tres a cinco años. Este método se considera de larga duración, pues, comparado con otros (como la píldora, el parche o la inyección), es efectivo durante un período de tiempo mayor. Este anticonceptivo puede resultar conveniente para personas que prefieren un método cuya efectividad no depende de la paciente.
¿Cómo funciona?
El implante es un tubo flexible que mide cuatro centímetros, más o menos del tamaño de un fósforo. Este implante es insertado por un profesional de la salud en el brazo de la paciente. Contiene la versión sintética (progestina) de la hormona natural progesterona. Además de evitar el proceso de ovulación, la progestina ayuda a espesar la mucosidad de la apertura del útero, lo que previene que un espermatozoide llegue y se una al óvulo. El dispositivo libera pequeñas cantidades de la hormona en la sangre periódicamente.
El procedimiento de inserción del implante es rápido y generalmente poco doloroso. El profesional que administra el medicamento coloca anestesia local en la parte superior del brazo y luego se inserta el implante con un aparato similar a una aguja.
La doctora Yarí Vale Moreno explicó en el episodio 61 del pódcast Se VALE preguntar, que este método generalmente elimina la menstruación; sin embargo, existe la posibilidad de que la paciente experimente una menstruación irregular.
Efectividad
El implante es 99% efectivo en la prevención de un embarazo. Este porcentaje coloca al implante dentro del mismo rango de efectividad que el IUD, siendo los métodos anticonceptivos reversibles de larga duración más eficaces disponibles.
La efectividad del implante no depende de la paciente, por lo que es un método que puede resultar beneficioso para personas que no desean tomar o aplicar sus anticonceptivos consistentemente a diario o semanal.
El implante comienza su efecto contraceptivo inmediatamente si se inserta dentro de los primeros cinco días de la menstruación.
En la página oficial de la organización sin fines de lucro Planned Parenthood, se recomienda que, si el dispositivo se inserta en cualquier otro momento del ciclo, se utilice otro método anticonceptivo (como condones) durante una semana. Luego de siete días, el efecto contraceptivo del implante entra en efecto.
El implante no ofrece protección contra enfermedades de transmisión sexual.
Efectos secundarios
Según la página oficial del centro médico sin fines de lucro Cleveland Clinic, algunos de los efectos secundarios más comunes en pacientes que utilizan el implante son:
- Manchado o cambios en el sangrado menstrual normal
- Dolores de cabeza
- Acné
- Dolor en los senos
- Cambios de humor
Se recomienda que la paciente acuda a sus citas de seguimiento luego de la inserción del implante para monitorear efectos secundarios prolongados o simplemente asegurar que todo esté bajo control.
Es importante destacar que si la paciente experimenta efectos secundarios no deseados, puede solicitar la remoción del implante.
Acceso
Para conseguir el implante, se requiere una receta médica. Si es la primera vez utilizando un método anticonceptivo hormonal, es importante asistir a una consulta médica para que el o la profesional oriente a la paciente y pueda dar la mejor recomendación a base de su evaluación.
Uno de los mayores retos para pacientes que optan por el implante es el acceso. Según Johana Molina Ortiz, trabajadora social en la clínica de ginecología Darlington Medical Associates, este método se consigue “muy poco”, incluso “menos que el IUD”. A diferencia de otros anticonceptivos, no todos los planes médicos privados cubren el costo del implante.
El dispositivo suele conseguirse en farmacias especializadas, según indicó Molina Ortiz, o en farmacias en línea. En contraste con otros métodos anticonceptivos, el implante no suele estar disponible en las clínicas sin fines de lucro Prevén y Profamilias.
El acceso a anticonceptivos para personas con el plan médico del gobierno, VITAL, es limitado, aun teniendo una receta médica. Por esta razón, las personas que cuentan con esta cobertura usualmente tienen que costear los anticonceptivos por su cuenta.
Costos
Como se mencionó anteriormente, no todos los planes médicos privados cubren el costo del implante. El precio del implante varía según la cobertura de la paciente y la farmacia en donde se adquiere.
Por otra parte, los costos por la consulta e inserción del dispositivo están sujetos al médico/proveedor de la salud.
El costo total por el implante puede variar entre aproximadamente $0 y $2,300.





