Ilustración de archivo / Adriana García Soto
¿Es posible ser religiosa y feminista? ¿Se puede ser conservadora y a la vez defender los derechos de las mujeres y comunidades LGBTTIAQ+? Esas fueron algunas de las interrogantes a las que tres feministas lideresas con base de fe respondieron de forma afirmativa este lunes, 21 de octubre, a dos semanas de las elecciones generales de 2024.
La psicóloga social Mercedes Rodríguez López, la profesora emérita Nina Torres Vidal y la teóloga Agustina Luvis fueron invitadas por Taller Salud al conversatorio virtual Navegando el derecho al voto con perspectiva de género. En este, conversaron sobre la nueva herramienta de análisis legislativo de Taller Salud, Mira cómo votan, sobre la relación entre la fe y el feminismo y sobre la importancia de votar con perspectiva de género.
“Yo tengo a veces la preocupación de que pareciera haber un discurso o una narrativa bien dominante que hace un sinónimo entre ser creyente y ser conservador, o ser creyente y ser antiderecho… Quería escuchar un poquito (sobre) cómo ustedes lo ven”, fue la premisa que lanzó la moderadora del conversatorio y directora ejecutiva de Taller Salud, Tania Rosario Méndez, a las participantes.
Para la psicóloga social Rodríguez López, quien también es fundadora de la Casa Protegida Julia de Burgos, la vida de fe no es contraria a la defensa de derechos, pero se han propagado estereotipos que incitan a pensar que la fe es opuesta al feminismo y a la defensa de derechos.
“Hay un elemento de prejuicio y de estereotipo de pensar que las personas cristianas y, muy en particular, mujeres cristianas somos conservadoras en el sentido ‘Trumpista’ de la palabra… Yo creo que hay que poner esa mirada más en el detalle de la experiencia de mujeres en la iglesia y vamos a descubrir que son experiencias muy variadas”, explicó.
Luvis, por su parte, resaltó que existe una propaganda en los anuncios políticos que intenta confundir a las personas con temas de proteger a la familia, mantener la libertad religiosa y oponerse al derecho a decidir sobre los cuerpos.
“Aquí no hay nadie que no crea en la familia, no hay nadie que no crea en la libertad religiosa (y) el tema del aborto no es si crees o no crees en el aborto. Están poniendo unas aseveraciones que no tienen nada que ver con la realidad. Eso es parte de la propaganda para confundir a la gente”, explicó la también profesora del Seminario Evangélico de Puerto Rico. “Una persona conservadora no tiene que ser una persona antiderecho… puedes tener tus valores conservadores y favorecer que todos los seres humanos tengan unos derechos que tú tienes. No están en contradicción. Al contrario, de la fe se afirma esa equidad” añadió.
Por su parte,Torres Vidal, profesora emérita de la Universidad del Sagrado Corazón, señaló que los discursos donde la fe es contradictoria a la defensa de derechos, solo provocan que la gente deje de votar.
“Lo que quieren hacer es mantenernos amarrados y en la ignorancia. En la medida en que yo me vea tan amarrada, yo puedo decir ‘no voy a votar’, porque a mí no me gusta lo que está pasando, pero como no sé por dónde ir para averiguar, cómo lo puedo hacer, no voto”, comentó Torres Vidal quien también insistió en cuestionar y analizar los discursos incluso si vienen por parte de líderes religiosos.
Por otro lado, Rosario Méndez preguntó a las participantes sobre la importancia de salir a votar de manera informada, especialmente en términos de la legislatura. La interrogante surgió luego de que la activista y educadora presentara la más reciente herramienta de Taller Salud: Mira cómo votan. Esta permite monitorear algunos de los proyectos de ley más importantes del cuatrienio y observar quiénes fueron los legisladores que les apoyaron o que votaron en contra.
“La importancia mayor es que nosotras las mujeres votamos y para quien piense que el voto es algo sencillo, desconoce que el voto fue la pieza transformadora de los derechos de las mujeres a lo largo de la historia… Tenemos que estar pendientes a lo que está pasando en la legislatura porque llegará el momento en que tendremos que votar por esos candidatos y candidatas y tenemos que saber quiénes están dispuestos a trabajar en pro de los derechos de nosotras las mujeres”, afirmó Luvis mientras destacaba que un voto informado permite cambiar las situaciones económicas y políticas de las mujeres.
Rodríguez López, por otra parte, apreció la importancia de la herramienta de Taller Salud porque a la mayoría de los proyectos de ley que surgen en la legislatura no se les da visibilidad. “Taller Salud viene a cubrir un hueco grande de información, de enlace entre la ciudadanía y los contenidos de los proyectos”, destacó para luego resaltar que la ciudadanía muchas veces no tiene acceso al contenido de los proyectos de ley, ni a las vistas públicas ni saben cómo proporcionar una opinión.
Asimismo, Torres Vidal insistió en observar la historia de la lucha por el voto y preguntarse cuál es el rol que cada persona quiere tener en esa historia. “La lucha por el voto es una lucha que costó dolor, que costó trabajo, que costó vidas. Así que no la debemos tomar tan a la ligera”, puntualizó.
En el evento, también opinaron sobre el Proyecto del Senado 326 que planteaba el acoso como una modalidad de violencia de género y el Proyecto del Senado 1282 que se convirtió en la Ley contra el discrimen por estilos de cabello. A su vez, examinaron los componentes de la herramienta de Taller Salud.
La grabación del conversatorio se puede acceder en el siguiente enlace.
