Las manos que un día posaron para el artista Antonio Martorell son las que enmarcan la nueva pieza del maestro. Son manos delicadas y suaves, que inspiraron a Martorell por el gran parecido con su hermana, Consuelo. Estas manos también son referente del reclamo de justicia de todo un país por el feminicidio de Andrea Ruiz Costas.
La obra Consuelo (Las manos de Andrea) fue presentada al público, por primera vez, el domingo, en la sede del Colegio de Abogados y Abogadas, en Miramar. Durante ocho horas y media, personas visitaron la sala para acompañar el duelo, reflexionar sobre este impresionante retrato y aportar a la campaña de la Alianza Pro Transparencia (APT).
“Finalmente, fue instrumento de consolación para dos familias y bandera de lucha por el derecho de la mujer a la libertad y a la vida. […] Que este suelo iluminado por la manos de Andrea sea, en este colegio que aboga por nuestros derechos, significativo de que si el arte muestra la evidencia del crimen y la necesidad de justicia, nos toca a todos, togados o no, el defender la vida”, sentenció Martorell en su potente declamación por justicia a través del arte.
La coalición periodística, junto a la familia de Ruiz Costas, organizó la actividad para honrar su memoria y aportar a la campaña que pretende llevar al Tribunal Supremo de Estados Unidos el caso de acceso a la información sobre las grabaciones del juicio de Ruiz Costas.
El Tribunal Supremo de Puerto Rico otorgó un “no ha lugar” a las peticiones de las asociaciones periodísticas, apoyadas por la familia de Ruiz Costas, de divulgar las grabaciones de los procesos judiciales, en los que la víctima compartió sus testimonios de acoso, maltrato y amenaza por parte de su feminicida, Miguel Ocasio Santiago, sin recibir la protección que requería del tribunal.
La obra de Martorell es un homenaje a Consuelo, su fenecida hermana mayor, que, por coincidencia, inmortalizó también las manos de Andrea, quien posó para el artista un año antes de ser víctima de violencia de género.
“Dos mujeres que se unen en una pieza. Una madre de ocho hijos, fallecida a una avanzada edad, con una rara enfermedad, rodeada de sus seres queridos. Andrea, mi modelo de tan solo una hora, joven, bella, inteligente, con un porvenir de horizonte lejano, brutalmente asesinada en soledad. ¿No es acaso el arte un oficio de noble creación, recreación y llamado para el cambio generativo a transformar el mal en bien, y la muerte en vida?”, compartió el artista.
El arte se convirtió en la herramienta para reclamar justicia y transparencia. Asimismo, las organizaciones periodísticas informaron que están en la etapa final para someter ante el Tribunal Supremo federal.
“A la sociedad, el cambio está en nosotros. La salud y la educación también son piezas claves. Dejemos de evadir culpas, de esconder o de disfrazar deficiencias. Honremos la memoria de mi hermana. De eso se trata este evento, y, sobre todo, que nunca se nos olvide el nombre de Andrea Cristina Ruiz Costas”, manifestó Alexandra Ruiz Costas, hermana de Andrea.
La actividad también contó con la participación de Les Barrileras del 8M y su interpretación de Canción sin miedo, versión puertorriqueña.
La APT es un junte entre la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (Asppro) y el Overseas Press Club (OPC), creado para desarrollar una estrategia común para revocar la determinación de no divulgar las grabaciones ante el Tribunal Supremo de los Estados Unidos.
“Nuestra determinación de recurrir ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos continúa vigente e inamovible. Estamos en las etapas finales de la preparación del caso que se someterá al Tribunal Supremo federal. A partir de ahora, se hace urgente el apoyo del pueblo a través de sus aportaciones”, declaró Luis Guardiola, presidente del OPC y copresidente de la APT.
Por su parte, Damaris Suárez Lugo, presidenta de Asppro y copresidenta de APT, destacó que “en momentos en que el país requiere mantener la confianza en sus instituciones, el derecho al acceso transparente a la información en el manejo de los casos en los tribunales se hace más pertinente y necesario”.
“No hay justificación para no saber qué sucedió en esa sala. La fiscalización no es selectiva. Todo funcionario o funcionaria cuyas actuaciones estén sufragadas con fondos públicos debe estar bajo el escrutinio de quien le paga, que es el pueblo. Eso incluye a los miembros de la judicatura”, destacó Suárez Lugo.
Para aportar económicamente a la campaña de la alianza, puede hacerlo mediante PayPal a info@alianzaprotransprencia.org o donar a la cuenta de Banco Popular 036333131. Asimismo, réplicas de la obra fueron vendidas por un donativo sugerido de $45 en la actividad.
Lee aquí: Periodistas reclamarán al Supremo federal grabaciones de vistas de Andrea Ruiz Costas