(Fotos: Ana María Abruña Reyes)
Empleos y pensiones, salud, vivienda, educación pública, inmigración, autonomía de los cuerpos, violencia machista y seguridad pública fueron los temas que acapararon cada uno de los reclamos que las mujeres llevaron a la concentración 8M contra la deuda en la Milla de Oro, en Hato Rey.
Bajo el nombre de Coalición 8 de marzo, organizaciones y personas de manera individual llegaron, a partir de las 3:00 de la tarde, a la avenida Luis Muñoz Rivera, frente a Oriental Bank, donde se manifestaron mediante consignas y a través de diversas representaciones artísticas en el contexto de la Junta de Control Fiscal, la aprobación anoche del Proyecto del Senado 950 y el recorte de servicios esenciales para pagar la deuda.
Este paro de mujeres se sumó a otras manifestaciones locales e internacionales en el marco del Día Internacional de la Mujer.
Mientras los policías hacían líneas para acordonar la transitada zona, las mujeres, hombres y representantes de la comunidad LGBTTIQAP+ tomaron la calle para reclamar por sus derechos, exigir un trato digno para las inmigrantes, pedir un alto a la criminalización de la protesta, denunciar la falta de seguridad en las calles, señalar la importancia de una educación con perspectiva de género para combatir el machismo y otros.
Sumayah Soler, representante de la Sociedad Islámica de Puerto Rico, se pronunció por el micrófono sobre el derecho de las mujeres a una vivienda digna y segura, y responsabilizó a la banca de los procesos injustos de ejecuciones de hipotecas.
Romelinda Grullón, directora del Centro de la Mujer Dominicana, se unió para solicitar un “sistema de salud universal, digno y accesible para todas las personas sin importar la clase, identidad de género u orientación sexual”. 
“También, rechazamos el trato discriminatorio, que existe a las mujeres transexuales, transgénero e inmigrantes”, añadió.
“También, demandamos que se reconozca la prevención e intervención de violencia de género como un servicio esencial del gobierno”, indicó al señalar la importancia de la creación de un plan nacional con participación multisectorial y multidisciplinaria.
Como parte de las expresiones artísticas de denuncia,
el Colectivo Moriviví hizo una representación en la que la figura de una mujer “aborta” el sistema, en repudio al apoyo legislativo que tuvo el Proyecto del Senado 950, en el se establecen nuevas regulaciones al derecho al aborto.
“Ni las mujeres ni la tierra somos territorios de conquista”, gritaron las muralistas que integran al colectivo.
La cantante Macha Colón se unió a la agenda cultural para interpretar
sus temas, entre estos Jayá. Luego, se escenificó una pasarela en la que participaron mujeres trans y queer, a quienes se le dedicó esta jornada. También, el evento se dedicó a la Lolita Lebrón para conmemorar los 100 años de su nacimiento.
La agrupación Plena Combativa formó parte de las presentaciones con su propuesta musical antipatriarcal. El cierre de la actividad estuvo a cargo de las Barrileras 8 de marzo.
Llevan embargo feminista a los bancos
Antes de la concentración en la Milla de Oro, a las 11:30 de la mañana, la organización política Colectiva Feminista en Construcción hizo un embargo feminista a las instituciones bancarias Santander, Oriental, Banco Popular y First Bank en el centro comercial Plaza Las Américas, en Hato Rey.
Se dividieron por grupos para exigirles que asuman responsabilidad sobre la “crisis de vivienda” en el país.
“Tienen culpa de las personas que se quedan en la calle sin una vivienda digna”, expresó por un megáfono Zoán Dávila.
Con consignas como Y la crisis fiscal que la pague el capital y Estamos harta del sistema, estamos puestas pa’l problema, las manifestantes se plantaron frente al banco Santander, donde bajaron el portón.
Luego, los grupos se encontraron en el atrio central para continuar con sus reclamos.
“Estamos reconociendo que la vivienda es un derecho humano fundamental y que, en los últimos 10 años, la política de las instituciones financieras aquí, en Puerto Rico, ha sido desahuciar a las personas”, expresó Shariana Ferrer Núñez en un aparte con Todas.
“Es decir, primero cobrarles los altos intereses de deudas hipotecarias mientras le dicen al gobierno, como es el caso del Banco Popular, que le haga rescates financieros, y el gobierno federal ha accedido, en el 2018, un rescate financiero millonario al mismo banco que ha sacado de sus hogares a sobre 65 mil personas”, agregó.
Ferrer Núñez aprovechó el encuentro, y que se detuvieron personas para escucharlas, para enviarles un mensaje a los legisladores que votaron a favor del Proyecto del Senado 950 que establece nuevas regulaciones al derecho del aborto.
“En nuestros cuerpos, mandamos nosotras”, dijo, al recalcar que “nosotras decimos que vamos antes de la deuda y que vamos a seguir organizándonos y luchando para poder construir otra vida».
