Foto del archivo de Nahira Montcourt
La Colectiva Feminista en Construcción denunció un patrón de agresiones e intentos de intimidación en su espacio físico ubicado en el casco urbano de Río Piedras en el que incluso se les dejó un casquillo de bala frente a sus instalaciones.
Por medio de sus redes sociales, la organización política y antirracista alertó que, entre el 22 de marzo y el 5 de abril, los espacios comunitarios que utilizan para sus actividades —debidamente identificados— fueron llenados de escombros, y las banderas de Puerto Rico y República Dominicana que ocupaban la puerta de sus instalaciones fueron arrojadas al suelo. Durante ese mismo periodo, estudiantes del programa after school que ofrecen, fueron objeto de agresiones verbales por parte de individuos en evidente estado de embriaguez que se identificaron como agentes de bienes raíces, según denunciaron.
Además, la organización manifestó que el 5 de abril, un casquillo de bala fue dejado frente a sus instalaciones.
“Sabemos que estas acciones no son casuales. Responden a una estrategia que permea en nuestra memoria histórica y política, de perseguir y de intimidar a aquellas organizaciones y personas que luchamos por la liberación y la erradicación de los sistemas de opresión que amenazan nuestro bienestar. No nos cabe duda de que estos sucesos tienen la intención de desestabilizar nuestros trabajos y de sembrar miedo. Pero nosotras no nos dejaremos intimidar”, denunció la organización comunitaria.
La Colectiva destacó que no es la primera vez que viven un patrón como este e hizo un llamado a la comunidad para denunciar, confrontar este tipo de violencia y a tomar conciencia del valor que tiene su espacio para muchas personas.
“Exhortamos a que tomemos conciencia sobre la defensa y sostén de nuestro territorio-comunidad y del hogar político que la Colectiva es para muchas. Transitemos y defendamos juntas nuestros espacios comunitarios. Habitemos vivamente cada espacio de la comunidad que llamamos hogar”, concluye el comunicado.
